La línea San Martín se encuentra en su momento más crítico debido a la falta de tracción y la mala gestión de Trenes Argentinos. De las 24 locomotoras chinas adquiridas en 2014 durante el gobierno de Cristina Kirchner, menos de la mitad funcionan. Además, el material rodante antiguo reincorporado no ha sido suficiente para cubrir la demanda.

Desde esta semana, el servicio entre Retiro y Pilar solo funciona con cronogramas de feriado, causando cancelaciones y colapso en las horas pico. La línea debería estar electrificada desde 1986, pero el proyecto ha sido trunco en todas las oportunidades debido a la falta de cumplimiento de un acuerdo entre Ferrocarriles Argentinos y la empresa soviética Tecnostroyexport.

El material rodante CSR SDD7 adquirido en 2018 ya había presentado fallas en sus componentes y, ante la falta de repuestos, muchas de las unidades quedan radiadas. Esta situación no se regularizará al menos por unas semanas, según informa Trenes Argentinos

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