El jueves, en pleno mediodía, se vivió un trágico incidente en un local de comidas rápidas ubicado en la calle 9 de Julio al 100, en la localidad bonaerense de Morón. Un hombre de 49 años, identificado como Gerardo Alberto Greco, falleció después de atragantarse mientras almorzaba.

Gerardo Greco, quien residía en Mataderos, había viajado a Morón específicamente para un tratamiento médico. En el momento del incidente, estaba acompañado por su asistente terapéutica, quien se encontró en un estado de desesperación al ver lo que estaba sucediendo. La asistente terapéutica corrió a pedir ayuda dentro del local, donde se encontraban varios clientes y personal del establecimiento.

El médico que llegó rápidamente a la escena extrajo alimentos de la boca y garganta de Greco, y también retiró su dentadura postiza para evitar que esta se convirtiera en una obstrucción adicional en sus vías respiratorias. A pesar de los esfuerzos realizados, incluyendo intentos de reanimación, el estado del paciente era irreversible. Al momento de la llegada del médico, Greco ya no presentaba signos vitales.

Este incidente no es aislado. En los últimos meses, hemos visto varios casos similares en diferentes partes del país. En Santiago del Estero, un hombre de 52 años murió después de atragantarse mientras comía un asado con su familia. En Salta, un niño de 8 años falleció tras atragantarse mientras merendaba en la casa de su abuela. Estos casos han llevado a reflexionar sobre la importancia de la seguridad alimentaria y la necesidad de tomar medidas preventivas para evitar estos trágicos incidentes.

Las autoridades han iniciado una investigación para determinar las causas exactas del fallecimiento de Gerardo Greco. La fiscal Paula Salevsky de la UFI N° 4 del Departamento Judicial ha ordenado el traslado de los restos para realizar la autopsia pertinente.