La Subsecretaría de Ambiente lleva a cabo un rescate de monos carayá en Benavídez, desmantelando el cautiverio ilegal. Un ejemplar con problemas de salud destaca la urgencia de abordar el mascotismo ilegal.
En un operativo liderado por la Subsecretaría de Ambiente, a través de su Brigada de Control Ambiental (BCA), se llevó a cabo un rescate de cuatro monos carayá (Alouatta caraya) en la localidad bonaerense de Benavídez. La acción, ordenada por el Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional Nro. 2 de San Isidro, contó con la colaboración del Departamento de Delitos Ambientales de la Policía Federal Argentina.
Los monos, todos sin documentación que respaldara su origen legítimo, fueron encontrados en condiciones precarias, y uno de ellos mostraba serios problemas de salud. Con signos de castración y colmillos limados, la intervención quirúrgica será investigada en el marco de la Ley n.° 14346, que aborda el maltrato animal.
La Fundación Temaikèn proporcionó asistencia técnica durante el operativo, facilitando el traslado provisional de los monos al Ecoparque de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Posteriormente, serán llevados al establecimiento Proyecto Carayá, en La Cumbre, provincia de Córdoba, coordinando con la provincia que autorizó su ingreso.
La especie de monos carayá está catalogada como «amenazada», según la Resolución MAyDS 316/2021, y forma parte del Apéndice II de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES). La Subsecretaría de Ambiente, bajo la dirección de Ana Lamas, persiste en su compromiso de combatir el mascotismo ilegal, un componente crucial en la cadena del tráfico ilegal de fauna.